Capacidad del producto software para ser entendido, aprendido, usado y resultar atractivo para el usuario, cuando se usa bajo determinadas condiciones. Esta característica se subdivide a su vez en las siguientes subcaracterísticas:
Capacidad para reconocer su adecuación. Capacidad del producto que permite al usuario entender si el software es adecuado para sus necesidades.
Capacidad de aprendizaje. Capacidad del producto que permite al usuario aprender su aplicación.
Capacidad para ser usado. Capacidad del producto que permite al usuario operarlo y controlarlo con facilidad.
Protección contra errores de usuario. Capacidad del sistema para proteger a los usuarios de hacer errores.
Estética de la interfaz de usuario. Capacidad de la interfaz de usuario de agradar y satisfacer la interacción con el usuario.
Accesibilidad. Capacidad del producto que permite que sea utilizado por usuarios con determinadas características y discapacidades.